Les Chroniques de Jherusalem Abregees

Ms. 2533. Österreichische Nationalbibliothek. Viena. 1450

Las Crónicas de las Cruzadas Abreviadas o resumidas, relatan los hechos de los caballeros que durante la Primera Cruzada, a finales del siglo XI, conquistaron Jerusalén y otras muchas tierras arrebatadas a los turcos. Entre otros acontecimientos históricos, narra la conquista de la Ciudad Santa y la historia del reino de Jerusalén hasta su caída, así como una breve biografía de sus gobernantes, caballeros y otros personajes importantes de la corte. Este extracto de  unos hechos tan relevantes para la historia sugiere que su autor conocía perfectamente toda su historia, y que el manuscrito se utilizaba como un breve apunte o recordatorio genealógico. También se adivina una intención política o propagandística, dado el interes del propietario por una nueva cruzada, pues el padre de Felipe III el Bueno, Juan sin Miedo (1371-1419), fue hecho prisionero por el turco Bayaceto I en la Batalla de Nicópolis (1396).

El manuscrito se realizó en el taller de David Aubert hacia 1450 por orden de Felipe el Bueno, Duque de borgoña, nieto de Felipe el Atrevido. Está escrito en letra minúscula bastarda borgoñona, y decorado con iniciales de oro, borduras y miniaturas que describen batallas, sitios de ciudades y paisajes de horizonte dilatado, como gusta de hacer la pintura flamenca. Su extraño formato alargado y apaisado explica su propia razón de ser, pues aparte de una crónica, es una genealogía. Las genealogías se escribían sobre un pergamino que se pudiese enrollar y, en efecto, en un inventario de la corte de Borgoña realizado al morir Felipe el Bueno (1467), el asiento relativo a este manuscrito dice : "tournant en manière de rôle". Cuando se decidió cortar para su encuadernación en forma de códice, lógicamente el texto escrito en columnas no sigue en la columna siguiente.

 La dificultad de esta composición a cuatro columnas estriba en que las crónicas siguen en ellas relatos paralelos y no pueden leerse de modo seguido, columna a columna y página a página. Ciertas partes de la historia pueden leerse pasando a la próxima página en la misma columna, lo que recuerda de nuevo la intención de disponerse en rollo. Pero a veces debe interrumpirse la lectura dentro de la misma página, si se quiere seguir de modo comprensible el relato; ello ocurre porque se intercalan las historias de los diversos territorios de los cruzados en Oriente.

El códice tiene un formato poco frecuente, es estrecho y alargado y mide 28x54 cm. Va escrito y miniado por ambas caras y a lo ancho contiene cuatro columnas. Las miniaturas pueden contener un episodio del ancho de una columna, pero puede haber miniaturas que ocupan toda la página. Los paisajes, aunque verdeantes y frondosos como si se tratase de tierras nórdicas, a pesar de describir el texto hazañas en países más áridos, tienen el tratamiento detallado en el follaje o en los prados, como es habitual en la pintura flamenca. Las ciudades son convencionales, aunque el pintor ha tratado de dar a las edificaciones un carácter oriental en torres y cúpulas. Describe con complacencia los paisajes con ríos, valles, bosques. Los cruzados visten armaduras y hay personajes orientales a los que se ha querido caracterizar por la indumentaria. Son en total un número de 150 miniaturas.

Los 18 folios del pergamino contienen un texto escrito a cuatro columnas separadas y enmarcadas por las cinco tiras o entrecalles, cubiertas de un arabesco miniado sobre fondo azul, rojo o negro. Estas entrecalles están cuajadas de decoración finísima compuesta por elementos vegetales, flores, frutas y animales reales o fantásticos;  abunda mucho la hoja de acanto rizado, azul o verde.

Folios 7v-8r

Transcripción del texto:

7v/a: La noble ciudad de Jerusalén, que sitiaron nuestros Barones, se encuentra entre dos montañas. Contra la puesta del sol se encuentran el país y el mar de los filisteos. Donde el mar está más cerca es en Jaffa, a una distancia de 22 millas. En, medio se encuentra el castillo de Emmaús. Allí también se halla la muy noble ciudad de Modin. Contra la salida del sol se encuentran el río Jordán y el desierto. Allí están los valles inhospitalarios y el lago que llaman Mar Muerto. De este lado del río Jordán está la ciudad de Jericó, que tomó Josué.

8r/a: Allí está Galilea. Hacia el sur está la ciudad de Belén, donde nació Nuestro Señor. Y Hebrón, donde enterraron a los patriarcas. Al norte está Gabaon, la ciudad de Josué. Allí estaba Bethel, donde el pueblo adoró al becerro de oro. Esta ciudad se llamó en su día Samaria, y aun hoy en día se llama así en este país. La ciudad de Nablus se encuentra cerca de Samaria y en su día se llamó Siquea, a la que destruyeron Simón y Leví, el hijo de Jacob, y a cuyos habitantes mataron en venganza por la violación de su hermana...(sigue en 8v/a)

8 r/b: Cómo Jerusalén fue tomada por los Barones franceses. El Duque Godofredo, el Duque de Normandía y el Conde de Flandes emprendieron un gran trabajo. Pues en una noche quitaron todas las máquinas y torres del sitio que tenían y las llevaron a aquel lado de la ciudad que hasta entonces no estaba sitiado, de modo que los turcos quedaron muy sorprendidos, ya que por aquel lado no estaban preparados de ninguna forma para la defensa. Y nuestros Barones habían llevado sus máquinas lanzadoras y torres de sitio cerca del muro. Esa noche no durmieron y sus máquinas estaban bien colocadas antes de la salida del sol y todas estaban listas para el combate... (sigue en 8v/b)

Facsímil en Catálogo Fama
Original consultable en línea en la Biblioteca Nacional de Viena